Oculta
Tanta belleza,
oculta,
tanta humanidad
desperdiciada
Tantos sueños
rotos,
tantas lunas
sola,
tantas nostalgia
opaca
Tantas cosas
y yo,
esperando.
Él, ausente
de mis plegarias.
La vida
llena de amores.
Los años de
colores,
el aroma a
naranja, a café,
a mates
perdidos,
con libros por
doquier…
y yo,
esperando.
Escribiéndome,
escondiéndome,
diciéndole al
mundo presente,
mintiéndome,
clamandole.
Solo es
eso,
lagrimas
negras de esperanza.
Ternuras equilibradas
de palabras dulces.
Estrellas sanas
que iluminan mis ojos,
pero ellas
no dejan tocarse.
Caritas tristes
que me abrazan
Y yo, espero.
Espero acá
que el sol me acaricie
Que cada mañana
me peine con canciones
Que los
sonidos de mi ser,
de mis
entrañas adormecidas,
de mi compañía
anhelada,
de mi todo femenino,
simplemente
desaparezcan
que no estallen
en mi almohada
Es, una
luna rota colgada en la ventana.
Son, muchas
ganas de creer y no pensar
Pero me
atrae el peligro,
y la inmadurez
carnal.
Me detengo,
vuelvo hacia mis pasos
Esperándome,
esperándote,
callándome,
cantándole a
los cielos y solo eso.
Cielos celestes
dorados, rosados y hasta grises,
que me atormentan
cuando siento frío
cuando se
sientan ante mi.
En mi casa,
en la calle, en las noches
en los
días, en los sentidos
solo hay tareas
y gente por ver.
Sin saber
que el camino es demasiado llano,
y, qué…
podría ser
de a dos
y no lo es
Autora; Jaquelin Parada
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