Entradas

Mi ilusión

Imagen
  La ilusión es como mi llamita que a veces se apaga con el recio viento patagónico. Como mi único motivo íntimo de existencia. Como mi ser existencial que nadie conoce. Como algo que no me ha permitido esta vida compartir. Mi ilusión,  mí espera, es como un sol cálido de mañana. Como un mate en compañía. Como frutillas en mis labios. Como rocío de primavera en mis manos. Mi ilusión es mi cobijo sin aliento. Mi abrazo del ángel guardián que no me habla. Mi desteñido corazón partido en la nada, esperando mirarte. Mi ilusión es no saber quien sos. Como serás. Qué tiempo transcurrirá hasta verte y escucharte. Hasta enamorarte, hasta decir nuestros nombres. Hasta que me elijas para siempre. Hasta cuidarte eternamente y no saber que los años pasan y no estás. Que sigo imaginándote en cada paso, en cada esquina, en cada tarde de otoño en cada cumple años y en cada noche de luna llena. No conozco tu aroma Y menos aun, sé; si t

Oculta

Imagen
Tanta belleza, oculta, tanta humanidad desperdiciada Tantos sueños rotos, tantas lunas sola, tantas nostalgia opaca Tantas cosas y yo, esperando. Él, ausente de mis plegarias. La vida llena de amores. Los años de colores, el aroma a naranja, a café, a mates perdidos, con libros por doquier… y yo, esperando. Escribiéndome, escondiéndome, diciéndole al mundo presente, mintiéndome, clamandole. Solo es eso, lagrimas negras de esperanza. Ternuras equilibradas de palabras dulces. Estrellas sanas que iluminan mis ojos, pero ellas no dejan tocarse. Caritas tristes que me abrazan Y yo,  espero. Espero acá que el sol me acaricie Que cada mañana me peine con canciones Que los sonidos de mi ser, de mis entrañas adormecidas, de mi compañía anhelada, de mi todo femenino, simplemente desaparezcan que no estallen en mi almohada Es, una luna rota colgada en la ventana. Son, muchas ganas de creer y no p

Opresión

Imagen
El viento desértico me quema los huesos, llena mis planetas nostálgicos de sudor, quita de mis entrañas el sabor a vida, me enseña a sentir del odio y a cubrirme de mis pecados azules Los muertos de mi garganta me envenenan, sulfuran el corazón de frases mentirosas echan por tierra mis deseos culminan mis encantos en su ira escriben en mi retina su pasado No quiero despertar y verme huyendo de mí, no quiero soñar con la nada y enfrentarme a mí. Quiero ser parte del universo, del sol de las nuves grises, de los cielos ajenos de casas sin gente de noches lujuriosas, a solas. Quiero enredarme en  mi alma creyéndome eterna ocultándome de tu violento abrazo. Quiero salir y gritarle a todos q vivo que sé y pienso sobre ellos, Esos que buscan lauchas para almorzar que sangran cadenas de sus ojos y solo quieren que callemos y seamos mansos Autora; Jaquelin Parada 

¿Qué es la generación Y? ¿Quiénes pertenecen a ella?

Imagen
Decidí comenzar este breve relato, diciendo que no comparto para nada las apreciaciones de algunos autores en cuanto a las características de los Y. ¿Quiénes son la generación Y? son los nacidos entre 1980 y 2000, hijos de una generación X de baby boomers  criados con una fuerte cultura de trabajo y autosuperación . En mi caso, estoy en el límite, porque nací en 1978, pero vivo la insolvencia de la conocida “sociedad líquida” según algunos sociólogos; concepto al que apuntaré en otra publicación de mi blog. Y, contrariamente a las apreciaciones que generalmente se manifiestan respecto a “nosotros”, entiendo que tenemos más acceso al conocimiento y muchos de  la X no tenían. Paso a detallarles en tercera persona, dichas características a mi gusto, cargadas de pesimismo: -Recuerdan vívidamente los ataques al World Trade Center, pero apenas tienen memoria de la caída del muro de Berlín. -Están rodeados por la inseguridad, están acostumbrados a convivir con la inseguridad

A veces los besos

Imagen
A veces los besos se dan con la memoria. Otras tantas con el corazón oscuro, con las manos llena de luz, con las alas quebradas, con la mirada perdidamente enamorada.   A veces los besos se quedan sin aliento, y se pierden en el tiempo, se olvidan, se pisan; se lastiman A veces los besos tienen sabor a consuelo. A viento desértico y esperanzador, con aroma a nada y color a tu esencia. A veces los besos no dicen nada. Otras tantas callan lenguas envenenadas. Succionan despacio y mojan el alma, quitando despojos de nostalgias raras. A veces los besos saben a olvido, queriendo sentir lo que no se ha vivido, sabiendo que nunca vendrá lo soñado O esperando en vano lo que no se ha creado. A veces los besos suenan muy fuerte, y otras solo silencian mentiras. Queriendo sellar heridas futuras, ocultando lejanas historias sufridas A veces los besos solo dicen te amo, y no siempre los besos saben igual. Porque tienen melancolía ahuma

La nada

Imagen
Años de un infiernoso deseo De imaginación extrema De cargar con ésta sensualidad ajena De estremecerme en tu ausencia De verte, De comerte sin tocarte Años de esperar el momento De querer y no animarme De sentir a escondidas Como un buen vino una noche de lujuria Palabras sueltas,  a la nada Todo fue pedazos de nada, de vos, de mí. Quebraste el sentimiento por impulsos Desechaste sin saberlo lo que pasaba entre nosotros Quererte y no quererte, esa es la cuestión Eras como el reflejo de la luna en el mar Una estrella colgada en la melancolía de mi alma Un dedo apuntador en mi corazón Eras; millones de lágrimas y un refugio que no existía Me tocaste y todo se derrumbó Creía que el amor podía nacer Que las melodías nocturnas sonarían a nuestro compás Pero… nada ocurrió Sos; un sendero más  una voz oculta y extraña Un sentimiento sin sentido, que muere en este instante. Jaquelin Parada

Impacto en las Relaciones Internacionales por la derogación de los contratos petrolero de Frondizi

Imagen
En cuanto al Acuerdo vinculado a la protección de las empresas extranjeras radicadas en Argentina ante posibles situaciones de expropiación, guerra civil o insurrección; que debía firmarse su prorroga; Illia ya había anunciado antes de ser electo como presidente que lo anularía en defensa de la soberanía nacional. Vale decir que dicho Acuerdo proviene de la época de Frondizi, y que la no ratificación por parte de Argentina  tenía un transfondo más bien ideológico presionado por los sectores nacionalistas vinculados a la explotación del petróleo como sinónimo de autarquía económica y no dependencia hacia EEUU, según lo expuesto por Carlos Escudé y Andrés Cisneros en su Portal de Historia de las relaciones Exteriores Argentina. Sin embargo para los liberales y desarrollistas la cosas giraba por otro lado, el ingreso de capitales extranjeros colaboraba con la explotación del petróleo, donde justamente los capitales nacionales eran insuficientes, y esto permitía el desarrollo económic