Introducción a la filosofía del yoga y los Vedas Parte III

Hablemos de epistemología en relación al VEDA.

Las palabras del veda son también un medio del primer conocimiento, como son los sentidos. Porque tiene una esfera de conocimiento independiente y valida por sí misma. Veda; proviene de Vuid que es conocer y Vedanta; teniendo en cuenta las dos ultimas sílabas DANTA; que es la ultima parte del Veda; que significa autoconocimiento.

Dentro del Veda está el KARMA; más conocida como la acción karmita, que involucra rituales como los mantras, disciplinas que se verán más adelante. Pero el Veda se presenta como fuente de conocimiento primaria e independiente, porque lo que tiene que decirnos no está disponible por los medios de conocimiento que tenemos a disposición (como son las percepción o la ciencia) Por ejemplo ¿puede el conocimiento científico hablar de qué sucede con la mente después de la muerte?. No, porque el objeto de conocimiento de la ciencia es físico y mediante los órganos de percepción. En este ejemplo no habrá experiencia comprobable, lo mismos sucede con Dios, porque no es objeto sino que es la causa del mundo. Ninguno de los dos casos está disponible para la experiencia humana desde los sentidos, pero no significa que sean imposibles de aprehnder tales conocimientos. El VEDA nos otorga eso que no está disponible en otro lugar, es como un jardín con muchas flores. Donde las flores pueden ser, el yoga, el reiky, la astrología, cartas natales o constelaciones, mantras, rituales etc. El Veda nos satisface las cuatro búsquedas humanas, como son la búsqueda del placer y la seguridad. El Veda no habla de una creencia, sino que habla del conocimiento sobre el YO SOY, no es ni dogma, ni teoría, ni especulación sobre mí. El Vedanta trata sobre mí, me habla de lo que está disponible, es autoconocimiento del propio sujeto. Es el principio del conocimiento que por causa de la ignorancia que tengo sobre mi mismo en la mente, el Vendanta será el agente que nos de luz. Esto no está afuera. El conocimiento está dentro nuestro, no exige un esfuerzo extra de nuestra parte, sino que está en nuestra naturaleza y debo hacerlo mediante un proceso de una vida cognitiva para asimilar dicho conocimiento. Porque la felicidad es naturalmente inherente a nosotros y no está reflejado sobre un objeto externo. El conocimiento está en la mente y la ignorancia también. La mente es limitada porque no somos los creadores del mundo, sino que fuimos hechos a su imagen y semejanza. Y el Vedanta por lógica nos transmitirá los conocimientos, aparte está la experiencia esotérica o etérea. Es por la mente que el conocimiento será tangible, no tenemos otra forma humana de hacerlo. No es estar en contra del misticísmo sino que busca eliminar la ignorancia, las creencias y encontrar el problema fundamental.

Eliminar la ignorancia conlleva tres pasos como parte del proceso cognitivo:

1) un estilo de vida (yoga).

2) reflexionar (internalizar lo que escucho, hacer que este conocimiento este disponible las 24 hs) y

3) estado de contemplación.

A modo de conclusión, obtenemos que la felicidad no está en un objeto externo.

El conocimiento del Vedanta habla de mí. No es académico, sino que quiero quitar la ignorancia de la plenitud que busco. Porque detrás de toda búsqueda está el anhelo de felicidad.

El Vedanta tarta con la verdad fundamental que debo VER con cierta objetividad, no es lo que yo creo. Nos quita el nudo del corazón, que hace que uno se vea como deficiente, para poder cambiar objetos, situaciones y personas. Por ello necesito un estilo de vida que me permita el conocimiento, examinando el adoctrinamiento que traemos sobre la espiritualidad. En base a ello hay ciertos rótulos a saber:

Cinco creencias del buscador espiritual:

1)     una persona espiritual está libre de emociones. No es cierto. Esto es un ideal, porque como humanos las emociones no piden permiso. Pero debemos fluir en ellas, saber bailar con ellas. No negarlas y menos frenarlas. Sino controlarnos en ellas. Tenemos que vivir la experiencia con esa emoción que nos invade.

2)     La familia y la espiritualidad son incompatibles. Tampoco es cierto. Porque la espiritualidad no es algo privado e íntimo. Sino que debemos poder en nuestros roles ser espirituales. Con esas responsabilidades lógicas de la vida en sociedad podemos tomarnos la misma como un constante yoga. Es actitud espiritual.

3)     El dinero y la espiritualidad deben separarse. No es cierto. Se cree que el dinero es profano, que nos corrompe, pero pertenece a este planeta como lo hacemos nosotros. Y vivimos en un sistema, por cuanto podemos como dice la cultura védica ser prósperos. Porque de eso está hecho entre otras cosas la ciencia, el ahorro o el progreso, donde habitamos.  Por ejemplo para los dáxina, donde se hacen los rituales védicos, es dar y recibir. Es un intercambio ya se de trabajo o servicio en el dáxina o de dinero al maestro. Porque los astram no son gratis, ahí se debe sostener un personal y una vida sistémica lógica de la tierra en la supervivencia. Por ello quien tiene problema con el dinero debe repararlo.

  4)     Todas las escuelas o doctrinas espirituales llegan a lo mismo. Es imposible afirmar esto porque para ello debe haber tiempo sufriente para leer y conocer a fondo cada una, de las miles existentes. Además no todas son en si mismo autoconocimiento. Para el caso del Vedanta, no solo es necesario tener equilibrio sino saber que primero fue de transmisión oral y hace poco tiempo comenzó a escribirse. El primer maestro del Vedanta es Shiva y luego está Shankaracharya. 

  Finalmente el maestro Swami Dayananda Sarasvati 

que fue maestro de mi actual maestro; Oscar Montero,

 mediante el cual aprendo y comparto como autora del este blog.

Óscar Montero

Swami Dayananda Sarasvati

Autora; Jaquelin Parada