La barba
Una barba
no muy añeja
trajo un
aroma a mi memoria
No es la explícita
barba
que me
cautivó hace pocos meses
pero al
menos es de esas, que me gustan.
Resulta que
áspera y sensual
se presentó
ante mi, seduciéndome.
Toque, sentí
y por momentos me enamoró.
Mas tarde
solo se esfumó.
No era esa
barba la de mis encantos.
Tiempo después
otra barba cayó en mi poder.
Encausados y
enredados pude apreciar su dulzura.
Pero mas
tarde también se fue.
No puedo en
mi humanidad contemplar barba alguna
dentro de
mi quijada
Pero se,
que detrás de tantas vidas habrá una para mí.
Está de
moda, lo se.
No importa
si es desinterés o abandono, para algunas.
La barba es es el sin fin de emociones para mí
Es un canto
a mi vientre y la lujuria en vida.
Es un mar
de sensaciones
de connotaciones
que me provocan.
Quiero ir
mas allá…..
Una barba
puede estar pintada
desdibujada
o incluso hasta desordenada
pero sigue
siendo esa cruel decencia bohemia
abundante o
paupérrima, la que me llama.
La barba es
y será, mi deseo exquisito
Es la perfección
del hombre
Es la
locura en mi cerebro y hasta pertenece
a mis
deseos más ocultos.
Como las
cosquillas por la espalda
y la boca
llena de sabor cuando la recuerdo
Muchas barbas
son mi deleite
pero hay
una, que aun no conozco
Y creo que
por ahí, merecerá un poema
Autora Jaquelin
Parada
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